La granada y sus propiedades beneficiosas

La granada es una fruta reconocida como beneficiosa desde la antigüedad, citada en la Biblia como una fruta sagrada capaz de brindar fertilidad, abundancia y buena suerte. También se halla presente en el arte y mitología de griegos y egipcios y fue el emblema personal del emperador romano Maximiliano. También forma parte de la heráldica de la ciudad de Granada, cuyo nombre deriva de esta fruta.
Si bien ha sido conocida y utilizada desde la antigüedad es recién a partir del año 2000 cuando se comienzan a reconocer en detalle todas sus propiedades nutricionales y medicinales. Lo interesante que parece que todas las partes de la planta poseen cualidades terapéuticas: el zumo, el aceite de sus semillas, la piel del fruto, las hojas del árbol, las flores y aún las raíces.

¿Qué propiedades tiene la granada?

– Es un poderoso antioxidante. En nuestra vida diaria nos vemos sometidos a la acción de los radicales libres, unos productos que se forman desde el exterior (radiaciones ultravioletas, polución ambiental…) o desde el interior (envejecimiento, enfermedades…). El zumo y el aceite de las semillas de granada tienen una acción poderosa “atrapando” y neutralizando a estos radicales libres.
– Actúa como un anti inflamatorio natural. Sobre todo el aceite de semillas de granada prensado en frío tiene esta propiedad, ayudando a disminuir la inflamación en cualquier proceso que curse con ella, por ejemplo, temas de huesos
– Propiedades anticancerosas en estudios “in vitro”. (Los  estudios “in vitro” son aquellos  que se hacen en un laboratorio). En ellos se observó   que tanto el zumo, como el aceite y también la piel de la granada inhibían el crecimiento de las células del cáncer de próstata que se ponían en contacto con estos extractos
– Acción protectora cardiovascular. Se ha encontrado que la granada ayuda a disminuir el colesterol LDL (“el malo”) y contribuye al mantenimiento de la tensión arterial.
– Parece también tener una cierta actividad bactericida. En estudios “in vitro” frena el crecimiento de ciertas bacterias y hongos como la Candida.
– Posibles efectos anti diabéticos, ya que mejora la sensibilidad a la insulina

¿Cuáles son las aplicaciones clínicas de la granada?

Desde los años 2000 se han realizado multitud de estudios y ensayos clínicos sobre las propiedades de esta fruta y la posible acción de sus extractos en la prevención de distintas patologías, algunas de las cuales son:
– Arteriosclerosis
– Aumento de colesterol
– Aumento de triglicéridos (otras grasas de la sangre)

– Hipertensión
– Diabetes (por su acción antioxidante)
– Problemas bucales: la aplicación local (tópica) de extractos de granada en formulación magistral parece ayudar, por su acción antibacteriana y antifúngica, tanto en la placa dental , candidiasis bucal, enfermedad periodontal y estomatitis
– Disfunción eréctil
– Infertilidad masculina
– Protector de la piel frente a la radiación ultravioleta, tomado por vía oral
– Enfermedad de Alzheimer
– Obesidad
Eso sí: mejor el zumo fresco, recién exprimido en casa. Los zumos artificiales y con el añadido de azúcar le restan propiedades. En países de Medio Oriente  tienen la sana costumbre de consumir zumo de granada fresco, recién exprimido. ¡Sería una costumbre muy saludable para copiar!

También puede adquirirse en forma de complemento alimenticio en distintas presentaciones (comprimidos, cápsulas, etc)

Este post es meramente divulgativo,  de   carácter general y no particular. A través de este medio no se realizan tratamientos ni comentarios sobre casos particulares.

Al ser de carácter público no se alienta la publicación de datos personales ni la historia clínica individual.